Otro número más de Carnage está en la calle y cada vez avanzamos más en su lucha contra Flash Thompson. En el número anterior dejábamos a Flash entrando en una casa cayendo en una trampa de Kletus. Además, cada momento que pasa el simbionte rojo está más fuerte y seguro de sí mismo.
Esta entrega tiene muy poco que contar pero aquí dejamos lo que ocurre.
Ojo que a partir de aquí habrá SPOILERS
Comenzamos el número viendo como Kletus había visitado a la madre de Flash en una residencia de ancianos, aunque parece una visita sin «peligro» dado que no la ataca, luego descubrimos que no.
En el presente, Flash se encuentra con el asesinato y sale a buscar a Carnage. En este primer encuentro Kletus somete a un interrogatorio a Flash sobre por qué teniendo el poder que tiene de curar cualquier enfermedad no estaba en un hospital salvando a la gente de cáncer o por qué cuando murió el simbionte le reconstruyó con todos sus recuerdos. Esto no es más que un plan para entretenerlo ya que en la visita a su madre Carnage la había envenenado con una sustancia muy nociva.
En ese momento, Flash va corriendo a ver a su madre y transformándose en Anti-Venom para tratar de curarla, sin embargo, el veneno es muy poderoso y la está destrozando desde dentro dejándola casi muerta.
Carnage aparece y tiene un enfrentamiento con Anti-Venom y nos damos cuenta de varias cosas. La primera de ellas es que todo, desde el principio, es un plan para hacer salir a Venom y enfrentarse a él para matarle y ser el simbionte más poderoso. Por otra parte, descubrimos que cada vez que Anti-Venom golpea a Carnage éste se hace más fuerte ya que ha evolucionado y el poder de sanación no le hace ningún daño.
Terminamos el cómic con Carnage encerrando a Flash en la Darkforce y preparando su plan contra Dylan. A partir de ahora la historia continuará tanto en las páginas de Carnage como de Venom.
