Ya tenemos el número de dos de Carnage en las librerías estadunidenses y el simbionte más cruel sigue haciendo de las suyas tras su regreso en el número anterior.
En esta nueva entrega seguimos viendo cómo Kletus Kasidy continúa con su plan de fundar una religión y de deja un gran reguero de muertos por el camino.
Ojo que a partir de aquí habrá SPOILERS
Comenzamos el cómic con Carnage asesinando a una persona mientras narra que todos los asesinos seriales se creen dios, pero cuando tu victima pide clemencia tú sí te conviertes en su dios.
En otra localización, Flash Thompson está investigando los asesinados numerados de Carnage mientras ve una serie de programas que informan de estos y de cómo se están produciendo, aunque la mayoría se centran en el multimillonario Nathaniel Jones mientras obvian las otras victimas. Aquí nos damos cuenta que los números de los asesinados, doce, y los nombres, Matthew, Phlip, Simon …, encajan con los apóstoles de Jesús.
Volviendo con Kletus este va a un bar siguiendo la pista de alguien lo que le lleva a una travesía por carretera en la que se encuentra a un autoestopista de nombre Mark. Con él tiene una conversación sobre cuál es la diferencia entre un profeta y un loco a lo que este no sabe muy bien qué responder. En ese instante, Carnage lo asesina y deja un «altar» con sus restos.
Mientras eso ocurre, Flash tiene una reunión con Elizabeth Allan CEO de Alchemax. En dicha reunión, trata de convencerla de que la «persona» que está detrás de esta serie de asesinados es Carnage aunque ella piensa que Tony Stark lo desintegró. Sin embargo, acepta hacer una serie de pruebas a una nota de sangre que Flash piensa que es de Carnage. Dentro de él se está produciendo una lucha interna por dejar o no actuar a su simbionte.
Para finalizar este segundo número, vemos a Kletus llegando a un pueblo en el que narra que ahí le llevaban cuando estaba en el orfanato. Tras hacer una breve búsqueda encuentra lo que buscaba: al verdadero Kletus Kasady el cual está encima de una pila de cadáveres y que le dice que diferencia entre un profeta y un loco es la audiencia.
La serie va avanzando un poco lenta pero nos deja con varias intrigas como la de por qué Flash no quiere usar su simbionte ya o qué busca Carnage y Kletus buscando al Kletus original. Tendremos que esperar al número tres para saberlo.
