Cuando la franquicia Predator fue adquirida por Marvel Comics estaba más que claro que iba a ser usada en algún crossover con algún personaje de la Casa de las Ideas que pudiera hacerle frente en una lucha, y quién mejor que Lobezno para ello.
Tanto Lobezno, el mejor en lo que hace, como Predator son dos expertos cazadores que con un gran sentido del olfato y que acorralan a sus presas hasta dar y acabar con ellas. Pero, ¿Qué ocurre cuando ambos se convierten en presas y cazadores al mismo tiempo el uno del otro? Esto es lo que nos plantea este crossover entre ambos personajes y nos deja un número uno bastante interesante.
El primer número lo puedes adquirir en inglés aquí.
Ojo que a partir de aquí habrá SPOILERS
El número nos emplaza en los bosques canadienses en el presente con un Lobezno destrozado mientras nos dice que aunque el es el mejor en lo que hace ahora no, ahora él es la presa y pronto vemos que el cazador que le está cazando no es otro que un Predator con lo que Logan se tiene que esconder para poder vivir otro día.
A continuación, nos dan un salto a 1900 en Alaska en donde Lobezno, aún sin haber pasado por el proyecto Arma X, sobrevive dando caza a animales y vendiendo sus pieles, pero sin acumular demasiadas riquezas. Sin embargo, esto provoca las envidias de otros cazadores de un pueblo cercano al que él se acerca a vender su caza, puesto que realmente Logan vive en una cueva rodeado de animales salvajes.
En el bar de este pueblo tiene lugar un enfrentamiento con unos cazadores a los que Lobezno derrota con suma facilidad y en la pelea conoce a un hombre que quiere contratarlo para rescatar a su hijo que ha sido secuestrado. A su vez, en esta misma localización aterriza un Predator para demostrar que es el mejor cazador de la Galaxia y empieza a asesinar a todos los seres vivos que se encuentra a su paso, ya sean cabras, pumas, ciervos u orcas.
Logan acepta rescatar al hijo de su contratante y este le va guiando hasta una cabaña. Cual es la sorpresa de ambos cuando en las inmediaciones de esta se encuentran con una auténtica carnicería: animales despellejados, humanos colgados boca abajo de los arboles, vísceras por todos los lados… Lobezno piensa que esto lo han cometido los secuestradores y entra en la cabaña destrozándoles todo ante la atenta mirada del Predator camuflado.
Cuando Logan acaba con todos los secuestradores es traicionado por su contratante que le da un tiro por la espalda confesando que no había ningún niño y que en realidad había contratado a esos ladrones para asaltar una diligencia pero se habían quedado con el dinero, pero poco le iba a durar la alegría ya que el Predator entra en escena asesinándolo y enfrentando a Lobezno que tiene que huir al saberse inferior.
Evidentemente, el Predator no iba a dejar que una presa tan interesante como Lobezno se le escapara, sin embargo, este logra guiarle hasta la cueva en donde se aloja para que sea atacado por un oso salvaje permitiendo que él pueda zafar de su perseguidor y pensando que el oso conseguiría derrotarlo, cosa que no sucedió aunque Logan no lo sabría hasta años más tarde.
Damos otro salto en el tiempo a hace algunos años atrás en las selvas de Sudamérica en las que Lobezno, ya dentro de Arma X y con las memorias borradas una y otra vez, está junto al Equipo X para derrotar a un líder de la guerrilla. La misión era fácil una vez que acabaran con el centinela, pero cuando llegan al poblado rebelde se encuentran que este está despellejado igual que los que vio en Alaska hace muchos años. Esto activa en él una serie de recuerdos y más cuando es atrapado con una red metálica a la vez que se desvelan varios Predators en las sombras.
Con esa imagen acaba este primer número que es muy interesante. No ya solamente por enfrentar a dos cazadores en una pelea sino por el hecho de que vemos que esta caza se ha ido sosteniendo a lo largo del tiempo y en diferentes localizaciones. El crossover va a ser súper emocionante de seguir y veremos cómo consigue, si lo consigue, sobrevivir Lobezno a la incesante persecución del Predator.