Hemos pasado el ecuador de Secret Invasion con el capítulo 4, el más corto hasta ahora con tan solo 38 minutos de duración, pero qué 38 minutos. No nos dejan ni un minuto de respiro desde el inicio del episodio hasta el final con una serie de revelaciones importantes y con un final impresionante.
Como hemos venido realizando en los episodios anteriores no vamos a hacer un análisis exhaustivo, eso lo dejamos para el podcast, pero si unos pequeños detalles.
Ojo que a partir de aquí habrá SPOILERS
Una de las dudas que nos dejo el episodio tres fue si G’iah estaba muerta y en la primera escena nos lo resuelven rápidamente con ella entrando en la máquina que otorga poderes de Super-Skrull y a continuación recuperándose del disparo gracias a la sustancia Extremis.
Sabíamos que Priscilla se iba a ver con Rhodey por la escena final del capítulo anterior. Dicha reunión se realiza en una iglesia en la que el Skrull Rhodey pide a Priscilla que asesine a Nick Furia. Ella le dice que no hace falta puesto que ya no es el mismo de antes del lapso, sin embargo, Rhodey exije que le mate o la que morirá sera ella. Esta conversación está siendo escuchada por Nick gracias a un micro oculto.
Por su parte, Talos tiene una reunión con G’iah en la que ambos tienen un desencuentro ya que, aunque G’iah estuvo infiltrada en los radicales de Gravik, no piensan lo mismo en lo que refiere a qué van a hacer el millón de Skrull que hay en la Tierra. Talos quiere quedarse en el planeta mientras que su hija quiere un planeta para ellos y así no tener que habitar otra piel.
Ya en casa en Nick y Priscilla estos tienen una conversación sobre cómo la Skrull adoptó esa identidad, sobre su matrimonio y sobre los objetivos que tenia Priscilla en la Tierra. Obviamente, Furia sabe que su mujer le quiere asesinar y así sacan ambos las armas encima de la mesa. La escena acaba con ambos disparando a la pared dando muestran que se quieren y con Priscilla sabiendo que ahora está en el punto de mira de Gravik.
En la siguiente escena vemos la apariencia Skrull de Rhodey al ducharse, es una mujer, antes de que este se dé cuenta que Furia se ha colado en su habitación de hotel. Tras una conversación en la que la Skrull chantajea a Nick para que se vaya descubrimos que le había echado en la bebida un localizador líquido.
La última escena, la más acción, vemos como Gravik ataca el convoy que transporta al presidente de los Estados Unidos a una reunión con Rusia. En ese ataque se hacen pasar por rusos para provocar una guerra.
En el transcurso del ataque, comprobamos como Gravik muestra sus poderes de groot al atacar a un militar. Además, gracias a la llegada de Furia y Talos consiguen frenar el ataque logrando también sacar al presidente del coche porque estaba inconsciente.
El final es impresionante, con Gravik asesinando a Talos con una cuchillada al corazón mientras Nick le disparaba en la cara y este se recuperaba gracias a Extremis.
Sin lugar a dudas, es un episodio en el que el plan de Gravik comienza a ejecutarse y nos deja pensando en qué ocurrirá en los capítulos que quedan.